Prohibido usar una plaza de garaje para almacenar otras cosas

Prohibido usar una plaza de garaje para almacenar otras cosas
Prohibido usar una plaza de garaje para almacenar otras cosas

¿Por qué está prohibido usar una plaza de garaje para almacenar otras cosas?

Una plaza de garaje es un bien inmueble que nos puede interesar tanto para uso propio como para elemento de inversión, que nos proporcione una renta mensual y que pueda revalorizarse con el tiempo.

Sin embargo, no podemos usarla como nos plazca, sino que debemos respetar una serie de normas y limitaciones que afectan a su uso.

El uso principal de una plaza de garaje es el aparcamiento de un vehículo, ya sea un coche, una moto, una bicicleta o un patinete eléctrico.

Este uso está amparado por el derecho de propiedad y por la normativa urbanística y de tráfico.

Sin embargo, no podemos usar la plaza de garaje para almacenar otras cosas que no sean vehículos, como muebles, electrodomésticos, cajas, herramientas o materiales de construcción.

Este uso secundario está prohibido por varias razones:

  • Puede suponer un riesgo de incendio o explosión si se almacenan objetos inflamables o peligrosos.
  • Puede dificultar el acceso y la circulación de los vehículos y las personas en el garaje, así como las labores de limpieza y mantenimiento.
  • Puede alterar la estética y la seguridad del edificio, si se colocan objetos que sobresalen o que puedan caerse.
  • Puede vulnerar los estatutos o las normas de la comunidad de propietarios, que pueden establecer limitaciones al uso de las plazas de garaje.

Por lo tanto, si queremos usar nuestra plaza de garaje para almacenar otras cosas, debemos tener en cuenta las consecuencias legales y económicas que puede acarrear.

Podemos enfrentarnos a sanciones administrativas por parte del ayuntamiento o la policía local, a reclamaciones judiciales por parte de la comunidad de propietarios o a indemnizaciones por daños y perjuicios a terceros.

Además, podemos perder el valor de nuestra plaza de garaje si se deteriora o se ocupa con objetos que impiden su uso como aparcamiento.

La mejor opción es respetar el uso principal de la plaza de garaje y buscar otras alternativas para almacenar nuestras cosas, como alquilar un trastero o un espacio en un guardamuebles.

Así evitaremos problemas y podremos disfrutar de nuestra plaza de garaje con tranquilidad.

Preguntas frecuentes sobre prohibido usar una plaza de garaje para almacenar otras cosas

Si tienes una plaza de garaje en tu comunidad de vecinos, es posible que te hayas planteado alguna vez si puedes usarla para guardar otras cosas además de tu coche, como bicicletas, armarios o cajas.

En este artículo vamos a responder a estas y otras preguntas frecuentes sobre el uso de las plazas de garaje como almacén.

¿Qué dice la ley sobre el uso de las plazas de garaje?

La ley no regula específicamente el uso de las plazas de garaje, sino que remite al título constitutivo o a los estatutos de la comunidad de propietarios, que son los que establecen las normas de convivencia y el destino de los elementos comunes y privativos.

Por tanto, habrá que consultar estos documentos para saber si existe alguna prohibición expresa o implícita de usar la plaza de garaje para almacenar otras cosas.

En general, se entiende que las plazas de garaje tienen como único destino el aparcamiento de vehículos a motor, y que cualquier otro uso incompatible con este fin está prohibido por el artículo 7.2 de la Ley de Propiedad Horizontal, que dice lo siguiente:

«Al propietario y al ocupante del piso o local no les está permitido desarrollar en él o en el resto del inmueble actividades prohibidas en los estatutos, que resulten dañosas para la finca o que contravengan las disposiciones generales sobre actividades molestas, insalubres, nocivas, peligrosas o ilícitas.»

Por tanto, si se usa la plaza de garaje para almacenar objetos que puedan causar daños, molestias, riesgos o infracciones legales, se estaría vulnerando esta norma y se podría iniciar una acción de cesación contra el propietario o el ocupante.

¿Qué problemas puede ocasionar usar la plaza de garaje como almacén?

Usar la plaza de garaje como almacén puede ocasionar varios problemas, tanto para el propietario como para el resto de la comunidad. Algunos de ellos son:

  • Invasión del espacio común: si los objetos almacenados sobrepasan los límites de la plaza de garaje y ocupan zonas comunes como pasillos, columnas o paredes, se estaría invadiendo el espacio común y dificultando el paso y el acceso al resto de vecinos y vehículos.
  • Incumplimiento del seguro: si los objetos almacenados no están cubiertos por el seguro del garaje o del hogar, en caso de robo, incendio o daños por agua, el propietario no podría reclamar ninguna indemnización. Además, si los objetos almacenados causan algún daño a terceros, el propietario podría ser responsable civil y penalmente.
  • Infracción urbanística: si los objetos almacenados incumplen las ordenanzas municipales sobre usos del suelo, seguridad, salubridad o medio ambiente, el propietario podría ser sancionado por el ayuntamiento con multas o incluso con la clausura del garaje.
  • Conflicto vecinal: si los objetos almacenados generan molestias, malos olores, ruidos o suciedad al resto de vecinos, se podría crear un conflicto vecinal que afecte a la convivencia y al buen ambiente en la comunidad.

¿Qué alternativas hay para usar la plaza de garaje como almacén?

Si necesitas más espacio para guardar tus cosas y no puedes usar tu plaza de garaje como almacén, existen otras alternativas que puedes valorar:

  • Alquilar un trastero: puedes buscar un trastero cerca de tu casa o en otra zona que te convenga y alquilarlo por el tiempo que necesites. Así tendrás un espacio seguro y adecuado para guardar tus cosas sin molestar a nadie.
  • Vender o donar lo que no uses: puedes hacer una limpieza y deshacerte de todo lo que no uses o no necesites. Puedes venderlo por internet o en mercadillos, o donarlo a alguna asociación benéfica. Así ganarás espacio.